Este domingo por la noche los New York Giants y los Buffalo Bills se enfrentaron en el ya tradicional Hall Of Fame game, que se lleva a cabo cada año, un día después de la ceremonia de inducción y una semana antes del inicio oficial de la pre temporada.
En el momento que el referee silbó el final del partido me puse a pensar 5 puntos para analizar del partido del HoF, y aunque no son muchos, uno que otro puede parecer interesante.
En primer lugar, football is back!! no importa si es un partido de pretemporada, si los titulares juegan una serie y si nadie le importa realmente el marcador final, el partido simboliza algo, que hay que empezar a calentar motores, dejar de hacer planes los domingos y que hay que desempolvar el jersey de nuestro equipo favorito.
El segundo es, ¿debe seguir jugándose este partido? a pesar de lo que ya se dijo unas líneas atrás, y de que se ha convertido en un partido tradicional, soy de la opinión de que es realmente inútil e incluso ventajoso para los equipos que lo juegan. Es cierto que las franquicias de la NFL han hablado de acortar la pretemporada, pero cada uno de estos partidos es realmente útil para el staff de cocheo y al final de cuentas este año los Bills y los Giants tendrán una oportunidad más que los otros 30 equipos de probar y analizar a sus jugadores con mayor profundidad.
Eli Manning no tuvo lo que se puede decir una gran actuación, sin embargo Ryan Nassib, sorprendió con un pase de 73 yardas y excelentes estadísticas (7-12-139 yds, 1TD)
El cuarto punto es la impresionante actuación del ataque terrestre de los Giants, entre el novato Andre Williams y Peyton Hillis acumularon 84 yardas en 14 acarreos, demoliendo la línea defensiva de los Bills una y otra vez.
Por último, el joven widereceiver de Buffalo, Robert Woods. La temporada pasada, como novato tuvo la oportunidad de dar chispazos de lo que puede hacer, pero hoy, aprovechando la profundidad en la posición en el equipo, brilló, con cuatro recepciones para 49 yardas, una de ellas de touchdown.
Estamos a exactamente 32 días de arrancar una nueva temporada de la NFL con el partidazo Packers vs Seahawks, no podría estar más emocionado.
