5 observaciones del triunfo de Raiders vs Texans
Por fin llegó el día en el que la NFL regresó a México. El estadio Azteca fue el escenario del juego Raiders vs Texans ante 76,467 espectadores, y en cuanto al nivel de ambos equipos en el terreno de juego, tampoco decepcionó. Hubo detalles que mancharon el partido, sobre todo desde la tribuna pero finalmente la mayoría de la afición a los Oakland Raiders salió feliz.
En realidad si sorprendió la actuación de ambos equipos. La Ofensiva explosiva de Raiders no lució como se esperaba ni la triste ofensiva que había mostrado Texans vino a México. En general fue un buen juego y los árbitros también agregaron su parte.
Vamos a las observaciones que el juego esperado por todo México.
Jadeveon Clowney juega cuando quiere
Me impresionó ver a este jugador jugando la forma en la que lo hizo, muy similar a sus highlights de sus épocas en Colegial. Su primer paso era impresionante y ganaba de una a dos yardas a los linieros ofensivos y así ayudar a detener el juego terrestre de Oakland. Incluso fue clave para que la ofensiva de Raiders no anotara dentro de la yarda 10 de Texans y tuviera que quedarse con intentos de field goal.
Si Clowney jugara a este nivel de forma constante, sería de los mejores de la liga.
Mal juego de la mayoría de los receptores de Raiders
Principalmente Michael Crabtree tuvo una mala noche. Muchos pases dejaron caer cuando parecían recepciones de rutina. También Seth Roberts tuvo algunos y de esa forma cortaban el avance de la ofensiva. Hubo una jugada donde Derek Carr lanzó el pase largo hacia Crabtree y por el simple hecho de quedarse el balón con una mano al final del proceso de la recepción, hace contacto el ovoide con su casco y lo deja caer.
Me decepcionó ver este tipo de actuación por parte de estos jugadores quienes venían mostrando un buen juego y eran los principales responsables de las buenas estadísticas de su quarterback.
Raiders se vió frágil ante los tight ends de Houston
El plan de juego de la ofensiva de Texans fue ser incisivos con Lamar Miller y buscar a su par de tight ends. C.J. Fiederowicz y Ryan Griffin tuvieron una noche para destacar y ambos se combinaron para 114 yardas terminando Fiederowicz como el líder en yardas por recepción.
Estuvieron atacando a los linebackers y Raiders no tuvo una respuesta a pesar de la intercepción que consiguiera Malcolm Smith. Y las rutas en su mayoría eran básicas como escuadra hacia la banda pero les resultaron efectivas para mantener la series ofensivas. Desafortunadamente para los de Houston no fue suficiente.
Aún sigo esperando el día en que usen mejor y con mayor frecuencia a DeAndre Hopkins.
El primero y diez que nunca fue
Poco después de la mitad del último cuarto, Texans se quedó a escasos centímetros de conseguir el primero y diez en una tercera oportunidad. Estaban en la yarda 15 de Raiders y el marcador se encontraba empatado a 20 puntos. O’Brien decide jugarse la cuarta oportunidad con una directa con Akeem Hunt y parecía que lo habían conseguido.
Vino la medición con las cadenas y se marcó que no había conseguido lo necesario. Fue increíble.
En el siguiente drive de Oakland termina en touchdown, el del triunfo.
La decisión fue la correcta e incluso la jugada también y aunque parecía que Hunt había hecho lo necesario, la colocación del balón por parte de los árbitros determinó que no había llegado. Jugada crucial que terminó por darle rumbo al juego.
La afición en el estadio falló
“Esto es México” dirían por ahí. Independientemente de los gritos carcaterísticos, homofóbicos o parte de la idiosincrasia de nuestro país, que pueden ser divertidos para unos y molestos para otros cuando los Texans se preparaban a realizar el kick off, el aficionado que tuvo la “grandiosa” idea de llevar un láser y apuntarlo al rostro de Brock Osweiler justo cuando buscaba a sus recpetores.
¿Es necesario buscar la trampa para ayudar? Raiders no lo necesitaba.
Ojalá algún día estemos a la altura de estos eventos…si vuelve haber.