No Rodgers no fun. Los Lions llegaron a Green Bay y posiblemente hayan tenido su partido más fácil en Lambeau Field en los últimos 20 años. No es culpa de Stafford y compañía que Aaron Rodgers esté lesionado, pero esa sólo es una cara de los Packers, a la defensa se vieron igual de mal y Detroit no perdió la oportunidad de conseguir una contundente victoria. Aquí el análisis del Lions vs Packers.
El partido se terminó cuando…
Theo Riddick tomó un pase pantalla y lo convirtió en un avance de 63 yardas con 9:49 por jugar en el último cuarto. Con el marcador 20-10, los Packers parecía que se crecerían y detendrían a Detroit para seguir aprovechando el momentum del juego. Pero el pase a Riddick mató cualquier esperanza en Green Bay.
Análisis del Lions vs Packers
Marvin Jones Jr. es el objetivo favorito de Stafford
Desde hace tres semanas, Marvin Jones Jr. está convertido en una amenaza poco sencilla de defender. A los Packers simplemente les hizo lo que quiso. Dos pases de anotación, 107 yardas y hasta dos festejos con buena dosis de creatividad. La secundaria de los Packers se dedicó a verle la espalda cada que atrapó el balón.
Jim Caldwell y la pésima selección de jugadas de Detroit
Si el partido sólo terminó 30-17 fue por culpa del HC de los Lions, Jim Caldwell. Y es que su mala selección de jugadas fue evidente en zona roja. Stafford lanzó poco en esa zona del campo y Detroit prefirió conformarse con goles de campo. Uno de 19 y otro de 31 hablan de lo cerca que estuvo el equipo de anotar por lo menos, 40 puntos.
Brett Hundely peca de precavido
Su pase más largo de toda la noche fue una escapada de Randall Cobb tras un pase de 10 yardas. Y eso es todo lo que al parecer se va a arriesgar el QB de los Packers. Es cierto que intentó un par de envíos largos, pero no los conectó y después de eso, volvió a lo seguro. Mientras siga tirando no más de cinco yardas por pase, va a ser difícil que los Packers encuentren un ritmo que les permita ganar.
A la defensiva de Green Bay le duele todo
Los Packers permitieron 417 yardas totales, apenas le hicieron un sack a Stafford y dejaron que Detroit convirtiera ocho terceras oportunidades. Tan mal se vio la defensa de Green Bay que los Lions ni siquiera tuvieron que utilizar a su pateador de despeje.
Abdullah necesita ser más productivo
El corredor de los Lions tuvo 21 veces el balón en su poder, apenas consiguió 48 yardas, ni siquiera tres por acarreo en promedio. Aunque anotó por tierra, el RB titular de Detroit tiene que ser más productivo, esta noche fue Green Bay pero ante rivales más complicados, no podrá ni siquiera cruzar la línea de golpeo.
Jordy Nelson es un fantasma más en Green Bay
Nadie en este mundo extraña más a Aaron Rodgers que Jordy Nelson. El WR de los Packers sumó una discreta actuación de cuatro pases y 35 yardas. Como Hundley no lanza largo, Nelson no es un amenaza para las defensivas secundarias y cuando lo busca, suele ser con pases a la banda, Nelson la está pasando muy mal sin su QB preferido.
MVP y villano del partido
MVP – Matthew Stafford – QB – Lions
El QB de los Lions tuvo un auténtico día de campo. Tan bueno fue el juego de Detroit que ni siquiera tuvieron que utilizar a su pateador de despeje. Stafford lanzó para 361 yards y dos pases de anotación, suficientes para silenciar el Lambeau Field.
Villano – Aaron Rodgers – QB – Packers
Y es que cada partido que no está, más notamos lo bueno que es. Las cosas que él hace sólo él las puede hacer. Por más que Hundley le trate de copiar, Rodgers es capaz de lanzar pases imposibles, de liderar un equipo que al parecer no tiene tanto talento como se cree y sobre todo, de poner él sólo a los Packers peleando por el Super Bowl. ¡Vuelve Aaron por favor!
¿Qué sigue?
Lions
Nada más dulce que saber que recibes a los Cleveland Browns la próxima semana. Los Lions tienen una magnífica oportunidad para ponerse con récord ganador y acercarse a la pelea por playoffs. El partido no debería de suponer ningún problema para Stafford y compañía quien si se lo propone, podría romper algunos récords.
Packers
La vida sin Aaron Rodgers ya es lo suficientemente difícil como para ahora medirse ante los Bears. Chicago estará esperando con los brazos abiertos a unos debilitados Packers a quienes buscarán hundir en el fondo de la división. Brett Hundley debe de arriesgar un poco más.
