Nota del editor: Esta entrevista a Brett Favre fue realizada en agosto de 2014 y se editaron algunas secciones para darle lógica y coherencia.
Por algunas de las fotos que han salido de ti, se nota que estás en buena condición. ¿Podrías jugar en la NFL en este momento?
Por supuesto que sí, sólo si prometen que no me van a golpear. Una de las razones por las que me retiré es que ya no quiero que me golpeen, sin embargo creo que es importante mantenerme en forma por mi propia salud. Además mi esposa también es una atleta en activo, así que yo también me tengo que mantener en forma.
¿Aún puedes lanzar bombazos de 50 yardas?
Aún puedo pero si lo hago voy a tener que ponerle hielo a mi brazo por un rato
¿Quién es el mejor jugador de la NFL en este momento? ¿o al menos danos tu top 5?
Tom Brady tiene que entrar en esta lista, todo lo que hace es ganar. Aaron Rodgers definitivamente debe de estar ahí. Adrian Peterson es también uno de los mejores en toda la NFL, combinación de fuerza y velocidad. Como quinto jugador me gustaría tomar a toda la defensiva de los Seahawks, lo que hicieron en 2013 fue simplemente sorprendente. Lo cierto es que la NFL cada vez es más una liga de quarterbacks.
Parece que desde que te retiraste los “gunslingers” en la NFL desaparecieron…
Creo que tienes razón. Creo que los QB actuales tratan de mantener la improvisación al mínimo y enfocarse en el diseño de las jugadas. De los pocos “gunslingers” que quedan está Drew Brees, un QB que va a seguir lanzando y que puede engañar perfectamente a las defensivas con sus ojos. Creo que la nueva tendencia de la NFL son los quarterback móviles, los que pueden ganarte con su brazo o sus piernas. En lugar de forzar el pase o buscar ventanas pequeñas este tipo de QB va a correr y ganar yardas. Jugadores como Cam Newton y Russell Wilson son un claro ejemplo de esto. Y para las defensivas esto debe de ser frustrante, ya que deben de estar al pendiente no sólo del pase, sino de las escapadas de estos QB. Necesitan atletas que puedan correr de lado a lado en el terreno de juego.
Es momento de hablar de tu larga y espectacular carrera en la NFL. Jugaste por 20 años, 297 juegos consecutivos en temporada regular bajo distintas circunstancias, como lesiones o pérdidas personales. ¿Cómo te preparabas semana a semana para soportar y continuar la racha de juegos consecutivos y seguir jugando a buen nivel?
El principal responsable de eso fue mi papá. Él me enseño como ser un jugador de football y la actitud de cómo acercarme al juego. El segundo factor fue la preparación que tenía semana a semana, creo que nadie estaba tan listo para jugar cada domingo que yo. La clave del éxito es estar preparado para cada rival cada semana y creo que durante la mayor parte de mi carrera logré eso.
También creo que hay un poco de suerte. Todos los jugadores sufren lesiones y afortunadamente ninguna pudo romper la racha, bueno, excepto la última. El último factor es nunca estar satisfecho y seguir teniendo hambre de triunfo, el vivir a las expectativas que yo mismo me puse. Nunca me permití fallar a estar ahí cada domingo
¿Crees que alguien tenga posibilidad de romper el récord de más juegos consecutivos?
Siempre ha posibilidad, pero la verdad es que hasta que me retiré pude comprender lo sorprendente que fue esa racha de juegos consecutivos, el jugar tanto tiempo. Es difícil que suceda, pero en la NFL nunca se sabe, además que esta racha también incluye Playoffs y son más de 300 partidos. Simplemente estoy muy orgulloso de mi carrera y de lo que he logrado.
¿Qué te dijo Brad Childress en 2009 para convencerte de jugar con los Vikings?
A lo largo de mi carrera he tenido la oportunidad de jugar con muy buenos jugadores y en grandes equipos, pero la química y el talento de esos Vikings era algo especial. Había una gran combinación de jugadores jóvenes y tipos viejos como yo. Ese fue el mejor argumento de venta de Brad y el hecho de que nos quedáramos tan cerca en la primera oportunidad fue la razón por la que volví un segundo año.
¿Cómo se sintió regresar a Green Bay como el QB rival? Ya los habías vencido en Minnesota y los Vikings estaban jugando muy bien ¿Qué tal fue esa noche?
Fue una noche llena de emociones, sin duda bastante especial. Por 16 años fui el QB de los Packers, era mi casa y parte de mi rutina y conocía perfecto el estadio, las instalaciones… todo. Además el público siempre me dio todo su apoyo ahí. Regresar como rival fue una experiencia surrealista y escalofriante. Fue una emoción distinta, sobre todo porque fue mi primera oportunidad de ver el estadio desde el otro lado. Fue una experiencia que jamás creí vivir en mi vida y no tengo más que respeto por Green Bay,
Sobre esa temporada y el “Bountygate” de los Saints, ¿Tu sentiste que eras el blanco en específico de los Saints en la Final de Conferencia de la NFC?
Desde mi punto de vista fue “otro día en la oficina”. Jamás me sentí amenazado en ese partido o en ningún momento de mi carrera de que alguien me quisiera lesionar a propósito. Ellos ganaron jugando bajo las reglas de la NFL y en la NFL puedes golpear al QB y los Saints lo hacían muy bien ese año. ¿Siento que me golpearon más en ese juego que en otros en mi carrera? Probablemente sí, pero no es algo de lo que me queje. Jamás me molestó nada de ese partido y este es un deporte difícil y duro tanto física como mentalmente. Así es este deporte.
¿Cuáles son los 3 mejores momentos de tu carrera en la NFL?
El primero sin duda es ganar el Super Bowl con los Packers en la temporada 96. El siguiente debe de ser el partido de lunes por la noche en Oakland después de la pérdida de mi padre. El jugar en la forma en que lo hice (399 yardas y 4 TD) fue algo especial, pero fue mucho más sorprendente la reacción de los fans de Oakland quienes tienen todo mi respeto y admiración. En tercer lugar yo creo que pondría toda la temporada 2009 con los Vikings. El tener ese año tan especial, a pesar de que no llegamos al Super Bowl fue una gran temporada.
Enfrentaste a muchas defensivas durante tu carrera. ¿Cuál fue la mejor defensiva y el mejor jugador defensivo al que enfrentaste?
La mejor defensiva fue Tampa Bay durante la época del Cover 2. Warren Sapp, Derrick Brooks, John Lynch y Ronde Barber formaban una defensiva extremadamente buena. En cuanto a jugadores, tuve el privilegio de jugar junto a Reggie White y también en contra de él y… era muy complicado. Reggie White era un tipo completamente dominante, algo que jamás había visto en mi vida. Y Warren Sapp podría también entrar en esa categoría, virtualmente imposible de bloquear. Enfrenté a muy buenos jugadores, pero me quedo con esos dos.
¿Qué te dijo Michael Strahan cuando rompió el récord de sacks en una temporada contigo?
Lo primero que hice fue felicitarlo por la gran temporada que tuvo. Ese año él también era imposible de bloquear. Mike es un buen amigo mío y tengo mucho respeto por él como jugador y como persona.
¿Por qué usas el número 4?
Uso el número 4 porque no tuve otra opción. Cuando llegué a la Universidad de Southern Mississippi pedí el número 10, pero ese jersey estaba en proceso de retiro y no me iban a dar ese número. Ellos me dijeron que podía tomar el número 4 o ningún otro número… así que dije: “4 está bien”.
