Crónica de un partido que nunca ocurrió en el Estadio Azteca

0

Fue una noche mágica en el Estadio Azteca. Más de 75 mil aficionados llenaron por completo el recinto de la Ciudad de México y el partido no decepcionó en lo mínimo. Tanto Chiefs como Rams nos regalaron una noche mágica y uno de los mejores partidos de la Temporada NFL 2018, en donde el local venció a Kansas City 54-51, en uno de los mejores partidos que he visto.

A pesar de que son dos equipos que no tienen mucha popularidad en nuestro país, el ambiente fue espectacular. En el estadio se celebró cada jugada grande (y créanme, hubo muchas). Al igual que en los otros dos partidos en los últimos años, fue un lleno total en el Estadio Azteca. A diferencia de los otros partidos, este juego fue largo pero muy, muy divertido.

Esta es la crónica del duelo de NFL en México 2018:

La ofensiva de los Rams comenzó con el pie derecho y nos mostró por qué es una de las mejores en toda la liga. En el primer TD de la noche, un envío de Jared Goff a Robert Woods, un afortunado asistente se llevó un souvenir extra, ya que el receptor de los Rams lanzó el balón con el que anotó a la tribuna. Greg Zuerlein tuvo problemas para ajustarse a la altura de la Ciudad de México y por ello falló el primer punto extra. 6-0 para los Rams.

Y la defensiva de Wade Phillips también hizo su trabajo en la primera serie ofensiva de Kansas City, ayudada por los castigos. Los Rams obtuvieron de regreso el balón y volvieron a pasar sobre los Chiefs, consiguiendo el segundo pase de TD de la noche para Jared Goff. Esta vez Zuerlein no falló el punto extra. 13-0 para sorpresa de todos en el Coloso de Santa Úrsula.

Sin embargo la ofensiva de Kansas City demostró que también es una de las mejores y México tuvo la oportunidad de ver la magia de Patrick Mahomes en vivo. Le bastaron sólo cuatro jugadas llegar a la zona de anotación, con acarreos de Kareem Hunt y pases a Tyreek Hill. Con eso los Chiefs se acercaron 13-7 para deleite de la afición de la NFL en nuestro país, quien estaba viendo un partido a la altura del récord de 9-1 con el que ambos equipos se presentaron a jugar.

La ofensiva de los Rams se mantuvo en modo imparable, ayudada por los castigos de la secundaria de Kansas City. El segundo cuarto comenzó igual de mal para los Chiefs, con castigos. Poco a poco los aficionados de México estaban mostrando su preferencia por el equipo de Los Angeles, que entrenó en Denver durante toda la semana para adaptarse a la altura.

Sin embargo, en la tercera serie ofensiva de los Rams, cerca de la zona de anotación, los oficiales marcaron un castigo de interferencia de pase. Andy Reid retó la jugada ya que el pase había sido desviado en la línea de anotación, lo que obligó a una patada de FG corta de Zuerlein, poniendo el marcador 16-7 para Kansas City.

El espectáculo del brazo de Mahomes continuó cautivando al Azteca. Sobre todo la precisión con la que encontró a Tyreek Hill. Durante el calentamiento se le vio lanzando bombazos de 70 yardas y todos esperábamos ver al QB hacerlo en algún momento del partido.

La ofensiva de los Chiefs se ha mostrado tan efectiva en el juego que poco importa que los castigos les quiten yardas, pues en las siguientes jugadas las vuelven a ganar. Sin problemas, Kansas City llegó a la yarda 10 de los Rams. Mahomes estuvo a punto de anotar por tierra en una jugada optativa que casi hace explotar al estadio, y en tercera y uno la defensiva de los Rams pudo contener a Kareem Hunt.

A pesar de que todos en el estadio le suplicaban a Andy Reid jugársela en cuarta oportunidad, el coach de los Chiefs hizo lo correcto y mandó a Harrison Butker a patear el FG. 16-10 favor Los Ángeles.

Y una vez más salió al terreno de juego la ofensiva de los “locales”. Jared Goff, Todd Gurley y el resto de los Rams fueron recibidos de nuevo por el público entre aplausos y gritos. Sin embargo, parecería que en esta serie la defensiva de los Chiefs sí salió a jugar. De hecho, tras un par de capturas vimos la primera entrega de balón, un fumble del QB de los Rams. De nuevo la ofensiva de los Chiefs tendrá la oportunidad de darle la vuelta al marcador. En tan sólo una jugada Kareem Hunt transformó un pase pantalla en TD y los Chiefs le dieron la vuelta al marcador, 17-16. El ruido que generó el Azteca fue ensordecedor… sin duda la noche pintaba para ser mágica y México no pudo tener mejor suerte para alojar un partido de temporada regular que lució como de Playoffs.

Así, poco a poco el apoyo de México comenzó a irse para los Chiefs. Goff tuvo un pase largo para Brandin Cooks, pero fuera de eso la defensiva de Kansas City despertó y frenó a L.A. cerca de medio campo. Los Rams despejaron y Tyreek Hill dejó sin aliento al recinto con un gran regreso de despeje, mismo que fue anulado por un castigo.

Con la espalda contra la pared, la ofensiva de los Chiefs salió de su propia yarda 5 gracias a un pase rápido a Hill, quien hasta el momento había sido imparable para la defensiva de los “locales”. Con el público rendido a sus pies, cada jugada que mandan los Chiefs hizo palidecer al ruido que podría generar el Arrowhead Stadium. Sin problemas este Azteca podría ser el estadio más ruidoso en toda la NFL.

Y así de rápido llegamos a la pausa de los dos minutos, con los Chiefs con el balón. El juego ha sido tan entretenido que es imposible distraerse por un instante sin perderse algo de acción… y créanme, nadie en el Azteca se quiso perder un segundo de este gran partido. De hecho nadie estaba sentado, todos de pie y a la expectativa de la siguiente gran jugada de la ofensiva de Kansas City.

Pero la noche era joven y apareció el mejor jugador defensivo de toda la liga: Aaron Donald. Después de la pausa de los dos minutos la defensiva de los Rams logró poner presión sobre Mahomes y provocó un balón suelto que Samson Ebukam recuperó, llevándolo hasta la zona de anotación. El estadio pasó de un silenció absoluto a celebrar la jugada y los Rams retomaron la ventaja 23-17. Pero aún quedaban 1:50 por jugar en el segundo cuarto.

La ofensiva de los Chiefs buscó algunos puntos antes de irse al descanso y fue el turno de Travis Kelce para brillar. En tres jugadas llegaron a la yarda 50 y una vez más el QB de los Chiefs puso un pase perfecto al TE con 34 segundos en la primera mitad. Jamás había escuchado al Azteca tan enérgico como en esta noche…

Tercera y 4 con 20 segundos por jugar en el segundo cuarto. Sean McVay tuvo que pedir un tiempo fuera por que no se escuchaba absolutamente nada más que los gritos de las 77 002 personas en el estadio. Y Mahomes lo hizo de nuevo, lanzó su tercer pase de TD en una mitad al ganar un poco de tiempo y encontrar a Chris Conley. Harrison Butker estuvo a punto de darle la ventaja a Kansas City, pero él también tuvo problemas para ajustarse a la altura de la CDMX y falló el punto extra. Nos fuimos empatados a 23 al medio tiempo y la ofensiva de los Chiefs tendría la bola al inicio de la segunda mitad.

Al medio tiempo tuvimos un respiro de un partido bastante competido. El juego de la NFL en México lució como un gran éxito, no sólo por la organización, sino porque el espectáculo fue aún mejor que lo que pudimos esperar: un empate a 23, dos grandes ofensivas y también jugadas a la defensa que han cambiado el rumbo. No hubo un sólo asistente sin una sonrisa dibujada en el rostro.

Los 20 minutos de descanso se fueron como un suspiro y los jugadores regresaron al terreno de juego. La ofensiva de los Chiefs continuó de forma imparable, con un pase corto a Chris Conley que convirtió en una ganancia larga. A pesar de lo espectacular de las ofensivas, vimos una lluvia de castigos, ahora para los Rams. En menos de dos minutos la ofensiva de Kansas City ya estaba en territorio de LA. Sin embargo una vez más la presión de la defensiva de los Rams hizo una jugada grande, otra vez Aaron Donald con un strip sack. Después de que el ovoide botara irregularmente por unos segundos en el Azteca, el local recuperó la bola.

La ofensiva de los Rams no estaba bien y necesitaba algo que los revitalizara. Cuarta y 1 desde la yarda 40, Sean McVay se la jugó. Y lo consiguió, a pesar del castigo de los Chiefs. Poco a poco se empieza a escuchar “RAMS, RAMS” desde la tribuna. Un par de jugadas después, Jared Goff con sus piernas logró el TD que puso arriba de nuevo a su equipo y ahora los cantos fueron de “GOFF, GOFF, GOFF”. Con el punto extra de Zuerlein esto se puso 30-23.

Si algo nos ha dejado claro este partido es que las ofensivas iban a avanzar sin problemas, aunque en cualquier momento estaba el peligro de perder el balón. Los Chiefs seguían luciendo imparables y Mahomes ha hecho un trabajo espectacular dándole oportunidad a todo su equipo de lucir. Y una vez más Travis Kelce hizo una jugada grande, ahora sobre su excompañero Marcus Peters. Y fue Kelce quien anotó para acercar a los Chiefs y empatar a 30 el que sin duda ha sido el mejor partido de la NFL en la Temporada 2018… hasta el momento.

Y apareció la estrella que había tenido, hasta el momento, una noche discreta: Todd Gurley. Con un par de recepciones ayudó a que la ofensiva de los Rams continuara moviéndose sin problemas contra Kansas City, sin embargo, después de un par de buenas jugadas defensivas, los Rams tuvieron una tercera oportunidad y 11… pero Brandin Cooks logró el primero y diez mientras que uno de los linieros de los Rams atropelló a un defensivo de Kansas City. El OHHHHH retumbó desde el estadio y se pudo escuchar hasta el Zócalo. Una vez más la defensiva de Kansas City puso a este ataque contra la pared… y pudo frenar al ataque de los Rams, limitándolo a un FG de Greg Zuerlein, quien puso el marcador 33-30, una vez más a favor de L.A.

63 puntos y 642 yardas de ofensiva total. Creo que no se puede pedir más para el segundo país con más aficionados en la NFL: México.

Y en un partido lleno de estrellas, uno de los jugadores menos improbables para brillar era Ekubam, pero además de anotar un TD por regreso de fumble, interceptó un pase de Mahomes y consiguió su segundo touchdown defensivo de la noche. Y de la nada la ventaja de los Rams ya era 40-30.

Y poco a poco el Estadio Azteca se transformó en una sucursal del Coliseo de LA, por que la mayoría de los aficionados “neutrales” se convirtieron en Rams y Mahomes comenzó a sentir la presión de jugar como “visitante”. De hecho un pase incompleto se marcó como fumble y los Rams anotaron de nuevo, pero los oficiales revisaron la jugada y anularon de forma correcta la anotación… pero el público abucheo de todas formas. Tres y para fuera y parece que los Chiefs se están desmoronando.

Para cerrar el tercer cuarto y con una ventaja cómoda, los Rams empezaron a utilizar a Gurley, el único jugador de los Rams a la ofensiva que faltaba por anotar. Con 15 minutos por jugar la ventaja de LA se veía sólida, pero Mahomes ya ha hecho milagros en lunes por la noche, si no pregúntenle a los fans de los Broncos.

Pero aun había partido, al menos la defensiva de los Chiefs decidió poner presión sobre Jared Goff y darle una vez más el balón a Patrick Mahomes con 13:42 por jugar y abajo por 10 puntos. Tyreek Hill se volvió loco y decidió regresar una patada de despeje desde la yarda 1, para la sorpresa del Estadio Azteca.

El escenario estaba pintado para que Mahomes se reivindicara. En el peor juego de su carrera, con el público en su contra y lanzó un pase perfecto profundo a Tyreek Hill de 71 yardas, aprovechando que un jugador de los Rams se resbaló. La ventaja de LA se hizo más pequeña, 40-37 y con un Estadio Azteca que no daba crédito a lo que se estaba presenciado. 91 yardas en dos minutos. La especial noche de NFL en México era mejor de lo que cualquiera de nosotros imaginábamos…

Los Rams entraron en shock. El público que los aclamaba hace unos minutos ahora les dio la espalda. Su ofensiva se estaba quedando sin variantes y Sean McVay quemó el segundo tiempo fuera de esta mitad. En una crítica tercera oportunidad llegó el TD defensivo de los Chiefs, Justin Houston le arrancó el balón a Jared Goff y Alan Bailey anotó para volverle a dar la ventaja 44-40 a los Chiefs. En menos de 3 minutos Kansas City anotó 14 puntos, pero la noche aún es joven y en este partido hemos visto de todo.

11 minutos por jugar y la ofensiva de L.A. regresó al terreno de juego en búsqueda de una respuesta ante la marea roja. Goff encontró a Reynolds para un pase de más de 30 yardas y luego a Woods para ponerlos dentro de la yarda 10. Este se está convirtiendo en el mejor partido de temporada regular que he visto en mi vida y tuve la oportunidad de hacerlo en vivo y en mi país.. todo un sueño hecho realidad.

Tercera y goal para los Rams… y Goff encontraba a su TE Everett para volverle a dar la ventaja a los Rams 47-44 y este juego tenía todo para acercase a la marca de más puntos en un juego de NFL, la cual es de 113… La fiesta que se vivía en el Estadio Azteca fue algo que no había sentido nunca, un ambiente de nivel de Super Bowl, al menos cuando Tom Brady logró el mejor regreso en la historia del Súper Domingo.

El último cuarto parecía no tener fin. Mahomes regresó a la cancha del Azteca con 9:38 por jugar y con el objetivo de volver a darle la ventaja a los Chiefs. Sin embargo los Rams sacaron un poco de defensiva y frenaron a los Chiefs. El objetivo en ese momento era tratar de que se acabara este mágico partido de NFL en México 2018.

Pero la defensiva de Kansas City también frenó a los Rams. De repente, en un juego que lo ha tenido todo, vimos un duelo defensivo al menos por unos minutos. Drama, emoción, jugadas grandes y entregas de balón. El mínimo error podía ser la diferencia.

Cuarta y 2, 4:57 por jugar y parecía uno de los momentos clave. Los Chiefs se la iban a jugar y el último tiempo fuera de McVay evitó lo que parecía una jugada grande de Kansas City. La tensión se sintió en cada una de las 77 mil personas que están aquí. Mahomes recibió el centro y encuentró a Kelce en un pase de 18 yardas que ponía al menos el empate al alcance del equipo de Reid.

La serie ofensiva continuó con menos de 4 minutos por en el último cuarto. La ofensiva de Kansas City siguió avanzando aunque el Estadio Azteca quería tiempo extra, más de este maravilloso partido. Sin embargo, los Chiefs anotaron con 2:47, el sexto pase de TD de la noche de Patrick Mahomes, un récord de lunes por la noche. 51-47 y nadie podía creer la clase de partido que estábamos presenciado.

Goff y los Rams sabían que necesitaban una anotación. 75 yardas los separaban de la victoria y Kansas City tuvo el triunfo en sus manos, pero no pudieron interceptar el pase de Goff. Los Rams ya estaban a medio campo con dos minutos por jugar. Los aficionados del Estadio Azteca vieron cómo los Rams se pusieron de nuevo al frente con un pase de 40 yardas de Jared Goff, en el primer partido en la historia de este deporte en donde dos equipos superaban los 50 puntos. Pero le dejaron 1:49 a Patrick Mahomes y los Chiefs…

De nuevo fue turno para Mahomes, quien pasó de tener un mal partido al mejor juego de su carrera y aún tenía 1:44 para empatar o darle la vuelta. 75 yardas lo separaban, de nuevo, del triunfo más importante en su corta carrera.

Tercera oportunidad y 10, el Azteca estaba mudo. El público ahora estaba apoyando el tiempo extra y Mahomes puso un pase perfecto a Hill para que los Chiefs llegaran a la yarda 50, con 88 segundos. El siguiente pase le robó el aliento al Azteca: Mahomes ganó tiempo en la bolsa y justo cuando buscaba a su receptor le pegaron en el brazo. El balón flotó por lo que parecía una eternidad y quien atrapó el pase fue el exjugador de Kansas City, Marcus Peters. Jamás había celebrado una jugada como esa en toda su carrera.

Los Rams buscaban a como diera lugar extinguir los segundos de este partido, un primero y diez era lo que los separaba de su décimo triunfo. La defensiva de los Chiefs logró frenarlos con 64 segundos, pero Johhny Hecker tuvo una patada espectacular. Los Chiefs después de dos pases cortos quemaron su último tiempo fuera con 24 segundos. Básicamente estaban buscando un milagro de último segundo en el Estadio Azteca.

Pero el milagro no llegó y la plegaria de Mahomes terminó en las manos de los Rams. Se terminó uno de los mejores juegos en la historia de la NFL, ganaron los Rams 54-51.

“Un juego increíble, cuatro cuartos de locura y estoy orgulloso de formar parte de eso. Patrick es un gran quarterback. Fue un partido muy divertido. En la serie final teníamos la confianza de que podíamos ganar el partido y lo hicimos. Han sido unas semanas muy largas, pero fue un honor estar en México para este partido. Este triunfo también se lo dedicamos a todos en Los Angeles”, fueron las palabras de Jared Goff al final del partido.

Al final, en una noche perfecta, la NFL, los Chiefs y los Rams le regalaron a México una de las mejores noches deportivas en la historia. Este juego es un clásico instantáneo y el mejor partido en la historia de los Monday Night Football. De hecho tiene todo para ser el mejor en la historia de la temporada regular…

Lo peor de todo es que esto es falso, una ficción. El partido fue una joya, pero el escenario no fue el Estadio Azteca…

0 0 vote
Califica el artículo
Suscríbete
Notifícame por
guest
0 Comentarios
Inline Feedbacks
View all comments
x