Para ganar titulos, primero hay que ganar partidos y para ganar partidos hay que trabajarlos y hacer jugadas grandes. Te presentamos a continuación a los ganadores de la semana 13 de la NFL:
El RB de los Broncos, Phillip Lindsay. Corrió para 157 yardas y dos touchdowns, llevando a los Broncos a su tercera victoria consecutiva. En esa racha, Lindsay ha conseguido más de 100 yardas desde scrimmage en cada uno de los juegos y cinco touchdowns totales.
El RB de los Redskins, Adrian Peterson. Se escapó para 90 yardas para el touchdown en el juego contra Philly, adelantando a los suyos en ese momento 10-7. Es el acarreo más largo de su carrera (lo hizo a los 33 años). Terminó el juego con 98 yardas en sólo nueve toques de balón. Debieron ser más insistentes en el juego por tierra.
La defensiva de los Ravens. No dejaron a Matt Ryan llegar ni a las 140 yardas por pase, además de que consiguieron regresar un fumble a touchdown y tres sacks. Es lo único rescatable del equipo, ya que la ofensiva no luce bien hasta ahora. Es engañoso que Lamar Jackson no haya perdido aún como titular. Lo está salvando esta potente defensiva.
Los Houston Texans. Suman nueve partidos ganados al hilo después de su inicio de 0-3. Nunca en su corta historia habían logrado algo así. Houston está de lleno en la conversación como uno de los cuatro mejores equipos de la AFC.
Rod Marinelli y la defensiva de los Cowboys. Limitaron a la ofensiva más explosiva de la liga a 10 puntos a tan sólo 176 yardas totales. Fue algo nunca visto lo logrado por la defensiva de Dallas el jueves. Su Front-7 es realmente emocionante, tienen dos linebackers con la capacidad de dominar la liga los próximos años, además de una línea muy poderosa. Si cierran bien y le dan ritmo a la ofensiva, tal vez todos dejen de decir que Dallas no tiene chance en postemporada.
Los Arizona Cardinals. Por primera vez ganaron en Lambeau Field venciendo a los Packers de Aaron Rodgers. Un poco de ánimo dentro de la tempestad de temporada no vienen nada mal. Josh Rosen tiene mucho que mejorar, así como el equipo en general, pero tendrán que ir trabajando poco a poco.
Los L.A. Chargers. Perdían 23-7 al medio tiempo y en la segunda mitad sólo permitieron siete puntos y, lo mejor, anotaron 26. La victoria es de oro y más por la resiliencia que mostraron, la capacidad de anteponerse a un mal inicio.
El RB de los Rams, Todd Gurley. Sin duda hoy en día es el mejor corredor de la liga con todo y que hay buena competencia. Algo muy importante que ha mostrado es el entendimiento del momento de partido. Se escapó al final del juego contra los Lions y prefirió tirarse antes de la zona de anotación para bajarle más al reloj. Al final consiguió su segundo touchdown y cerró el partido, pero ayuda a su equipo a no dar oportunidad al rival. Gurley terminó con 132 yardas y los Rams ya piensan en postemporada.
El RB de los Giants, Saquon Barkley. Lo volvió a hacer el novato maravilla. Otro juego con más de 100 yardas desde scrimmage. Barkley fue parte fundamental para que los Giants vencieran a Chicago el domingo gracias a sus jugadas explosivas en las dos mitades y el tiempo extra, ahora consiguió 125 yardas terrestres en 24 acarreos. Lo más impresionante es que no ha soltado el balón una sola vez en toda la campaña.
El TE de los Eagles, Zach Ertz. Tienen 93 recepciones en la temporada y va en excelente paso para romper el récord de Jason Witten de más recepciones en una temporada por un TE (110). Ertz es el mejor tight end de la liga en este momento gracias a su gran capacidad de hacer jugadas grandes, conseguir yardas después de la recepción, hacer atrapadas espectaculares y lo más importante: No comete errores, no se desconcentra, no pierde la cabeza. Los Eagles vuelven a aspirar a postemporada gracias a su victoria ante Washington.
